LOS ANDES (14/12/2018).- El teléfono celular que uno de los delincuentes olvidó en el auto de la víctima permitió a la Policía de Investigaciones obtener pistas claves para poder identificar a los tres autores del violento asalto perpetrado en octubre pasado en una casa de la población Ferroviaria.
Así se desprende de la carpeta investigativa del Ministerio Público que fue dada a conocer por el fiscal Jorge Alfaro Figueroa en la audiencia de formalización de Felipe Sepúlveda Plaza (25), el único de los tres integrantes de la banda que fue capturado por la policía la madrugada del jueves en allanamientos efectuados en las comunas de Pudahuel y Cerro Navia.
De acuerdo a la investigación, Sepúlveda Plaza y sus dos compañeros de fechorías (Cuya identidad no entregamos por estar siendo buscados por la policía), se conocieron en el año 2017 cuando los tres cumplían condena en la cárcel de Santiago Sur.
En el penal establecieron nexos de amistad y una vez que salieron en libertad a fines del año pasado se concertaron para perpetrar robos en casas tanto de la Región Metropolitana como de otras ciudades cercanas a Santiago.
Fue así que la noche del 22 de octubre, mediantes llamadas telefónicas y mensajes de texto entre ellos se concertaron para viajar al día siguiente a la ciudad de Los Andes con el fin de cometer un robo.
De esta manera, cerca de las 10:30 horas del 23 de octubre llegaron hasta el inmueble ubicado en la esquina de calles Esmeralda Poniente y Lagarrigue en la población Ferroviaria, saltando el cierre perimetral del inmueble creyendo que estaba sin moradores.
Luego y utilizando una barra de fierro forzaron la puerta principal del inmueble para acceder al interior, momento en el cual la dueña sintió ruidos y salió a ver que estaba ocurriendo.
La víctima se encontró con los delincuentes en el living, tras lo cual uno de ellos extrajo un arma de fuego corta y la intimidó, obligándola mediante empujones a dirigirse hasta uno de los dormitorios donde fue maniatada y le cubrieron su rostro con una polera, pero la prenda de vestir se le cayó y pudo ver perfectamente a los tres maleantes.
Uno de los antisociales se quedó vigilándola, mientras los otros dos revisaron toda la casa sustrayendo un notebook, un televisor LED, un celular, joyas de oro y plata, 200 mil pesos en dinero en efectivo, todas especies que cargaron en el automóvil de la dueña, un Citröen modelo Picasso de color blanco.
El monto de lo sustraído fue avaluado en la suma final de 11 millones pesos, incluido el vehículo.
Los antisociales escaparon en el vehículo de la víctima por calle Esmeralda hacia el oriente y luego doblaron por Santa Teresa al sur, momento en el cual se cruzaron con un radiopatrullas de Carabineros que se dirigía al inmueble luego que la afectada se zafara de sus ataduras y pidiera ayuda a vecinos para llamar a la policía.
Allí se inició la persecución y en el algún punto de la ruta dos de los asaltantes se bajaron del auto para subirse a otro móvil, mientras que el tercer antisocial siguió al volante hasta llegar al enlace de Auco donde perdió el control y chocó contra las barreras de contención, huyendo luego por unos predios sin que pudiera ser detenido.
En la revisión del auto hecha por los detectives de la Brigada de Robos fue encontrado el celular del delincuente que conducía el vehículo, el cual fue sometido a análisis y pericias, sobre todo en cuanto al tráfico de llamadas y mensajes de texto y redes sociales, estableciéndose que habían conversaciones con otros dos sujetos poniéndose de acuerdo para viajar hasta Los Andes a perpetrar un robo.
Estas llamadas y mensajes fueron claves para identificar plenamente a los tres integrantes de la banda, ya que esos números de celular estaban asociados a sus cuentas de Facebook.
Los detectives mostraron las fotos de los tres antisociales a la víctima, quien los reconoció plenamente como los autores del atraco, razón por la cual se tramitó una orden de detención para ellos, lográndose solo la captura de Sepúlveda Plaza.
Sin embargo, la detención de los otros dos asaltantes es inminente.
El antisocial detenido fue formalizado por los delitos de robo con violencia e intimidación, registrando además dos condenas anteriores por robo en lugar no habitado y robo con intimidación.
A petición del Ministerio Público, el Juez del Tribunal de Garantía de Los Andes Roberto Gahona decretó su prisión preventiva por los 60 días que fijó de plazo para el cierre de la investigación, toda vez que consideró que su libertad es un peligro para la seguridad de la sociedad.
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