LOS ANDES (26/11/2014).- Justo cuando se conmemora la semana de la no violencia contra las mujeres, nuestra ciudad pudo haber sido testigo del femicidio Nº 40 a nivel nacional, luego que un guardia de seguridad estuviera a punto de estrangular a su esposa utilizando para ello un cable de computador.
Este episodio de violencia intrafamiliar se produjo al interior de un departamento ubicado en la villa Portal Juncal, cuando el imputado de iniciales G.A.A.M., de 24 años, comenzó a sostener una discusión con su esposa Y de las N.A.A. por situaciones de índole personal.
El hombre repentinamente sufrió un ataque de furia y se abalanzó sobre su pareja, tomando un cable de computador que enrolló en su cuello y comenzó a estrangularla.
Como pudo la víctima logró zafarse y buscar refugio en el dormitorio matrimonial hasta donde la siguió el imputado que logró abrir la puerta y entrar.
Tras ello tomó a su mujer y la tiró sobre la cama, poniéndose encima de ella y con sus propias manos trató de estrangularla.
Afortunadamente en esos precisos momentos llegó al departamento el padre del agresor quien al ver la escena corrió a socorrer a la víctima sacándole de encima a su hijo.
Acto seguido la afectada junto a su suegro llamaron a Carabineros, puesto que el hombre intentó quitarse la vida efectuándose cortes con un cuchillo en las muñecas.
Personal policial llegó rápidamente al departamento y detuvo al agresor, trasladándolo luego junto a la mujer a constatar lesiones al servicio de urgencia.
Tanto víctima como imputado resultaron con lesiones leves, no obstante el fiscal Jorge Alfaro dispuso que el hombre pasara a control de detención.
Una vez en el Tribunal el imputado fue formalizado por el delito de Femicidio frustrado y ante la gravedad de los hechos y para dar seguridad a la víctima el fiscal solicitó la prisión preventiva.
Si bien la defensa cuestionó la calificación jurídica del hecho, argumentando que el imputado presentaba problemas sicológicos y había actuado motivado por fármacos ingeridos la noche anterior, la Jueza Valeria Crosa estimó la libertad del sujeto como un peligro para la seguridad de su esposa, decretando la prisión preventiva y fijando un plazo de investigación de cuatro meses.
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