Esta noche, Chile está de duelo. Y, ojo No es que la vida de esos dos estudiantes valga más que la de los carabineros también muertos inútil e injustamente, o de los mapuches acribillados en sus tierras, o de los miles de anónimos que se apagan sin parafernalia en cada miserable hospital o choza de nuestra Patria.
No. La verdad es que hace un rato ya que rebasamos ciertos límites. Parece ser que la vida humana deja de ser importante. El centro está en cualquier parte, menos donde debiera.
Y no tengo idea si es nuestro sistema, o si podemos parar de crecer o que China deje de inundar el mundo de plástico y CO2 no tengo idea.
Esta, es de esas noches en que la nada absurda parece ganar la batalla, en que el mal -es decir, la estupidez, la rabia, el resentimiento atávico, etc, etc- afila sus dientes y los hunde sin resistencia
en nuestros cuerpos en nuestra mentes cansadas, agotadas, agobiadas, de tanta mala nueva.
Esta noche, Chile está de duelo. No se si está bien o mal Rayar una propiedad privada
Agitar a las masas Incentivar el caos llamar al orden o parar la olla.
Sólo sé que una vez ida la vida no vuelve más.
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