Viernes, 29 de Marzo de 2024  
 
 

 
 
 
Opinión

Es justo y necesario ¡Yo quiero mi región de Aconcagua!

Por Pablo Rojas Torres, Licenciado en Historia, mención Ciencia Política PUCV.

  • Tuitea
  • Comparte
  • Imprimir

 
Más Noticias
     
  Trastorno bipolar y sociedad: Más allá de la patología
  #SentirElProgreso es hablar de menstruación
  Mejor llama a Luis
  La OCDE, las aguas y Chile: graves interrogantes
  Alianza Estratégica Siderúrgica Huachipato y Codelco Chile
  La caída de un gigante
 
 

La división política administrativa de un país, tal cual la comprendemos hoy, no debe considerarse como la simple organización que el Estado posee para dar solución a los requerimientos emanados al interior de la sociedad, ni tampoco como el marco referencial   que éste tiene para relacionarse con otros países. Sino más bien, como aquella estructura (imaginada) que, comprendiendo elementos geográficos, políticos, económicos, culturales e identitarios, da cohesión a la población a través del territorio, y sobre todo, otorga razón de ser al desarrollo de la ciudadanía.

Así se proyecta dentro de las actuales tendencias postmodernistas de desarrollo territorial y de esa forma pareciera ser que persistirá a raíz del triunfo de la globalización a escala mundial. Fomentándose el regionalismo, bajo la misma lógica que se propende a medidas de descentralización y desconcentración en pro de mayor autonomía de las regiones. No obstante tal augurio, una realidad totalmente distinta es la que vive nuestro país producto del centralismo persistente. Por ello, manifestemos a viva voz ¡es necesario una nueva estructura política-administrativa a nivel país! Una nueva división que, lejos de ser producto de imposiciones y determinaciones del poder central como lo ha sido desde los inicios del Chile independiente, se idee,  configure y materialice a través de la consideración de un pasado histórico común, una identidad cultural afín y una matriz socioeconómica correspondiente a sus fortalezas productivas.

En el plano local, válganos preguntar  desde nuestra condición provinciana ¿qué tenemos en común con Valparaíso? ¿Es pertinente ser parte de una realidad regional en conjunto? ¿Debemos y nos merecemos ser autónomos? ¿Qué se requiere para ser región? A priori son todas preguntas que exacerban el deseo por mayor autonomía respecto de la capital regional y, por qué no decirlo, apuntan a una reflexión que se centra  en la restitución de potestades políticas-administrativas que se quitaron debido a la imposición del modelo regional actual en la década del 70´, y qué como hemos sido testigos, han catapultado toda posibilidad de mayor desarrollo debido a la prevalencia de consideraciones, cuya razón de ser se forjó en un contexto sociopolítico distinto al actual.

Respecto a la primera interrogante, bástenos con echar un vistazo a la geografía  de la actual región. Por un lado: valle extenso y frondosa cordillera que propician la actividad minera, agrícola y una prominente actividad industrial; mientras que por otro, condiciones geográficas  proclives a la actividad portuaria, industrial y comercial. Cuestión que se replica a través de los recursos humanos presentes, aunque con gran desventaja desde los segundos para con los primeros desde el punto de vista de la tecnologización, innovación, apoyo de centros Universitarios y gestación de planes de desarrollo compactos y eficientes. ¿Es justa tal situación? Sin duda  que no. Es más, es una situación que tiende a proyectarse en el tiempo ya que,  pese a las  innovaciones que se han gestado y se presupuestan en el futuro  en torno a medidas de desconcentración  y descentralización como lo son el aumento del gasto fiscal regional, la democratización de las autoridades (elección de intendentes) y oportunidades de mayor disponibilidad de recursos autónomos a través de la ley de rentas regionales y la creación del Fondo de Convergencia Regional,  pareciera ser que en nada modificarán la actual condición de desventaja desde las cúpulas regionales respecto de las provincias interinas.

Basta del discurso reiterado proveniente del centro capitalino que promueve –como única opción-el desarrollo a través de la actual unidad regional en torno a la  cuenca hidrográfica. Basta con la retórica que postula la imposibilidad de ejercer cambios en la división política administrativa –la ley 20.050 contempla la posibilidad de modificar el esquema regional actual- Basta con asignar más recursos a las zonas menos favorecidas a través de consideraciones desde el centro y, más bien, avancemos hacia medidas democratizadoras y de consistencia real. Para el caso: de mayor autodeterminismo en pro del proceso de regionalización.

Desde el punto de vista de la factibilidad de dicho anhelo regional, creo es justo y necesario gritarlo con fuerza y convicción ¡sí se puede!  Así lo hizo Arica y Los Ríos años atrás, y con un gran avance se demuestra a través del proyecto autonomista de Ñuble en el último tiempo, por lo que solo queda insistir en la viabilidad de nuestra Región.  Sobre todo porque se apela a una realidad que hasta la década del 70´ existió y tuvo gran relevancia a nivel nacional -cuando eran 25 provincias el eje organizativo del país- y  que, queramos o no reconocerlo, actúa en la actualidad como elemento fundamental para proyectar nuestro ideal de futuro. Un ideal que se circunscribe bajo aquél proverbio que esgrime: “la realidad se construye y no se impone”. Siendo esa (re)construcción un objetivo a alcanzar, mientras que esa imposición la principal barrera la cual debemos derribar.

En palabras simples, se trata de democratización, reconocimiento, proyección e identidad colectiva…todos elementos que se integran bajo el lema ¡Región de Aconcagua es mejor!

 


 
 
Twitter Facebook Flickr
 

Trastorno bipolar y sociedad: Más allá de la patología

#SentirElProgreso es hablar de menstruación

 
 
 
¿Le gustan los resultados del proyecto de remodelación de avenida Argentina.
Si.
No.
Faltan más árboles.
Me da lo mismo
Ver resultados
 
 
 
Diario Electrónico Andes Online® | ©2000-2024 Derechos Reservados.
Miembro de EMR™ Chile - Estadísticas de Medios en Internet - Estadísticas Certificadas
Andes Online is Licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivs 2.0 Chile License
Prensa | Publicidad | Contacto