LOS ANDES (27/11/2015).- Depleyart abrió los fuegos de lo que fue la séptima edición del RincoRock, festival que no bajó la cortina hasta las 23 horas del domingo, cuando Consecuencia cerró con broche de oro dos días de música, paz y rock and roll.
“Esto es todo un desafío, ya que por primera vez en su historia se realizaron dos jornadas en las que el público respondió a cabalidad, la calidad de las bandas fue altísima y, el evento como saldo final, fue totalmente exitoso”, es la opinión de los organizadores.
Es así como alrededor de mil quinientas personas se acercaron hasta el Parque Urbano Ambrosio O´Higgins en Los Andes, para disfrutar del evento musical rockero que, con los años, se ha posicionado dentro de la parrilla de actividades anuales.
RincoRock es más que un festival donde se presentan bandas de rock. Hoy en día es una plataforma para las bandas locales, foráneas y emergentes en la que muchos músicos quisieran estar y compartir con el público asistente.
"Fue un camino complejo para llegar hasta lo que se mostró este fin de semana, al fin y al cabo, RincoRock lo hacemos un grupo de amigos que gusta del rock y que se lanzó, el 2009, en esta aventura que ha ido creciendo como una bola de nieve. Hoy sabemos lo que se espera de nosotros y nos esforzamos para ir creciendo. Se sacrifica el tiempo libre y horas con la familia, en persecución de este sueño. La gente lo entiende y el apoyo que recibimos antes, durante y después del festival ha sido muy importante para nosotros", dijo Williams Ponce.
Un llamado y agradecimientos
Detrás de los organizadores hay mucha gente que trabaja sin esperar nada a cambio y es “a ellos que les damos las gracias, a nuestras familias, colegas de trabajo, a todos quienes nos siguen desde hace años, a aquellos que nos aportan con su trabajo. A las municipalidades de Rinconada y Los Andes por su colaboración. Pero lo que hemos llegado a hacer hoy es también un llamado a las autoridades a crear más espacios como este y un llamado a todos, que se sepa que con perseverancia se pueden lograr grandes cosas. Quisiéramos ver más iniciativas como ésta replicada en el Aconcagua. Como señalara hace años Carlos Dittborn, porque no tenemos nada, queremos hacerlo todo", comentó el vocero del la agrupación.
Salud y rock and roll
Ya lejos del ajetreo de la organización y más descansado, Ponce dijo que la evaluación es más que positiva. “Al final del día terminamos agotados, pero contentos, con la repuesta de los asistentes, con su comportamiento, así como con lo entregado a las bandas tras su participación. Sabemos que hay detalles que mejorar, que todo es perfectible, pero vamos avanzando en pos de la consolidación de este festival y llegaremos hasta dónde nos lleve el camino. Este sueño no tiene techo", manifestó.
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