Durante las últimas semanas hemos visto con horror, indignación y pena una serie de asesinatos a mujeres y niñas en nuestro país, y también países vecinos como Argentina.
El asesinato de Lucía, una joven de 16 años, deja en evidencia una serie de situaciones que no pueden seguir sucediendo ni en Chile ni en ningún lugar del mundo. Hace poco lamentamos el asesinato de una niña de 9 años en Coyhaique por parte de su padrastro. Lamentablemente, la desigualdad de género sigue existiendo, está latente y que tiene como consecuencia fundamental una violencia contra la mujer, que no pocas veces, como en estos caso, termina en el asesinato.
A la fecha, lamentablemente debemos contar el femicidio de 26 mujeres en manos de sus parejas o ex parejas, y de 97 femicidios frustrados. La violencia contra las mujeres, no es solo un problema del Estado de Chile, sino que de la sociedad en su conjunto y para poder erradicarlo es necesario el compromiso de todas y todos, para así generar cambios sustanciales en los patrones culturales que no solo han normalizado la violencia, sino que además posibilitan las desigualdades entre hombres y mujeres.
Es por ello, que como mujer y ciudadana activa de esta comunidad, condeno profundamente este tipo de hechos y hago un llamado a la comunidad andina a comprometerse en la lucha por la eliminación de la violencia de género y garantizar la protección de los grupos más vulnerables de nuestra sociedad: los niñas y las niñas, las mujeres y los/as adultos/as mayores.
En mis más de 30 años de trabajadora social, también como ex gobernadora y como mujer he luchado firmemente en contra de la violencia hacia las mujeres y la violencia de género, una de las desigualdades más profundas que aún mantiene nuestra sociedad.
En mi gestión municipal, apoyaré acciones que eviten que se produzcan estos eventos de violencia intrafamiliar, para ello, el Programa Mujeres Jefas de Hogar, la OPD, no solo contribuirán al desarrollo laboral de las mujeres, o la promoción de los derechos de los niños y niñas, sino que también tengan una atención especial en el desarrollo de programas de educación contra violencia. Así también los pondremos en el sistema educativo municipal, tanto con los estudiantes, y sus apoderados. Realizaremos también acciones conjuntas y coordinadas de promoción de derechos y de prevención de la Violencia de género, con el Centro Provincial de la Mujer y la Fundación Prodemu.
Nuestra gestión municipal, se compromete a desarrollar estas y otras acciones, ya que no podemos tolerar ni una muerte, ni una agresión más. Entre todas y todos, lo podemos realizar.
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