LOS ANDES (22/01/2018).- El Centro de atención para hijos de madres temporeras recibe en el Liceo Max Salas a 70 niños de entre 6 y 12 años, quienes hasta mediados de febrero realizarán talleres de baile, manualidades, actividades recreativas, piscina y otros panoramas.
Gracias al aporte de la Municipalidad de Los Andes, el Ministerio de Desarrollo Social y el apoyo del Instituto Nacional de Deportes y Junaeb, las familias andinas pueden trabajar durante el verano, con la confianza de que sus hijos están bien cuidados disfrutando de las vacaciones.
El alcalde Manuel Rivera compartió con los beneficiados en el Liceo Max Salas, precisando que esta iniciativa apunta al cuidado de aquellos niños cuyas madres están trabajando en la temporada agrícola, “además con un ingrediente especial ya que algunos de ellos son hijos de familias que han migrado a nuestro país buscando nuevas oportunidades”.
Los niños están bajo el cuidado y supervisión de monitores que los reciben desde las 8:30 de la mañana hasta las 17:00 horas por la tarde, desarrollando en cada jornada actividades deportivas, recreativas, manualidades, ciclos de cine, talleres de folclore y baile, entre otros panoramas.
Sylvia Bobadilla, encargada del programa detalló que el centro de atención comenzó a funcionar el 10 de enero y que ya no hay cupos disponibles, esperando aumentar la cobertura el próximo año.
Precisó que el centro va a funcionar hasta el 13 de febrero en el liceo, “por las tardes tenemos piscina y estamos con cobertura completa así que contentos como municipio del funcionamiento de este proyecto postulado al Ministerio de Desarrollo Social”.
Gracias al apoyo de Junaeb, quienes llegan de lunes a viernes al Liceo Max Salas cuentan con alimentación completa y una serie de panoramas enfocados en la actividad física.
Uno de los monitores del centro, Mirko Bonacic, explicó que “acá los profesionales atendemos las necesidades vitales de los niños, se les brinda la alimentación desde temprano en el desayuno, luego los chicos realizan 3 tiempos de talleres de estaciones y cada semana termina con un festival deportivo. Por las tardes disfrutan de la piscina para capear el calor, con juegos de agua, competencias de nado y piqueros”, agregó.
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