Hoy te saludo Dirigente en tu día, con afecto y admiración por la importancia que tiene tu rol en nuestra sociedad, porque ustedes son imprescindibles para alcanzar nuestros sueños, mi reconocimiento hoy y siempre a ustedes grandes hombres y mujeres que con espíritu de servicio han puesto su vocación solidaria y comprometida para construir sueños, luchar por causas de justicia y equidad, para lograr ser la voz de los que no se atreven y lograr beneficios que aportan a nuestra calidad de vida y desarrollo local.
“Te propusiste como meta de vida poner al servicio de los demás, entregas tus capacidades y virtudes, sobre todo sin medir tu tiempo. Tus dolores se hicieron silencio, Mientras nacía y concretabas el anhelado proyecto que iluminó la plaza, que dio vida a la sede… fuiste dándote cuenta que con empeño todo se puede. Fuiste haciendo la obra de todos, con mucho trabajo y silencio que hizo del entorno de la ciudad y del barrio tu mundo y tu cielo”.
Pasan los años, sin darte cuenta dirigiendo, corriendo y sirviendo. Desde tus esfuerzos concretas muchos sueños, Haces magia de la nada sin importar los murmullos de las palabras necias que surgen desde la sombra, mientras trabajas sin descanso.
Te quedas con las cosas que todos aprecian, sedes, casas, plazas, canchas, o computadores. Que describen tu objetivo “obras son amores”, Te haces una coraza del cariño sincero. De aquellos buenos vecinos que están cerca de ti, Que describe tu vida de dirigente. Que vas por la ciudad sintiendo, el corazón de tanta gente.
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