RINCONADA (13/12/2015).- Pesar ha generado en toda la comunidad Católica y religiosa la muerte del sacerdote Carmelita Julio Díaz de Arcaya de la Inmaculada Concepción, hecho ocurrido la mañana del sábado al interior de Casa de la Comunidad Religiosa del Santuario de Auco.
El deceso del sacerdote de 81 años se produjo luego que sufriera la rotura de un várice, siendo encontrando sin vida en el baño de su habitación por otros religiosos.
Conforme a los antecedentes entregados por el Jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI de Los Andes, Comisario Gino Gutiérrez, llamó la atención que el sacerdote al no presentara a su oración matinal de las 8 horas, momento en el cual lo fueron a ver a su dormitorio encontrándolo sin vida.
Precisó que en la habitación habían huellas de sangre desde su cama hasta el baño, lo que da cuenta que el religioso sufrió la rotura de un várice en su pierna derecha y al ir a asearse perdió el conocimiento por la pérdida de sangre, falleciendo por una anemia aguda.
El oficial descartó completamente la intervención de terceros en su deceso y éste solo se debió a un tema de enfermedad, “ ya que el baño se observaba una gran cantidad de sangre”.
Los funerales del sacerdote quedaron de ser comunicados por la administración del Santuario.
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