LOS ANDES.- El cuerpo sin vida de un indigente fue hallado en horas de la tarde de este Jueves en un sitio eriazo ubicado en la población Virgen del Valle, a metros de avenida Pascual Baburriza.
Fueron los propios transeúntes quienes a eso de las 18 horas se percataron que el terreno ubicado en calle Baquedano Oriente, yacía sin vida sobre un colchón el indigente Víctor Daniel Tapia Robles, de 49 años, conocido como “El Monín”.
De inmediato los testigos dieron cuenta del hecho a Carabineros, constituyéndose en el lugar personal el cuadrante 3 quienes constataron el deceso del hombre.
El cuerpo se encontraba junto a un bidón con bencina, lo que en primera instancia hizo presumir que podría haber ingerido este combustible.
A los pocos minutos del hallazgo llegó al lugar el hermano del occiso, el comerciante Ricardo Tapia Manzano, quien reconoció que éste padecía de alcoholismo crónico y en reiteradas ocasiones habían tratado de sacarlo de su situación de calle, “pero él quería vivir así y más no podíamos hacer”.
Por instrucciones del fiscal de turno Ricardo Reinoso se constituyó en el lugar personal de la Brigada de Homicidios para realizar las pericias de rigor tendientes a determinar si hubo algún tipo de participación de terceros.
Tras el análisis del cuerpo se determinó que no hubo participación de otras personas, siendo una causa probable la cirrosis hepática que padecía.
Respecto al bidón de con bencina, el occiso lo habría utilizado para inhalarlo.
No obstante, será el informe de autopsia del Servicio Médico legal el que deberá establecer la causa precisa de su muerte.
Vecinos se quejan por sitio eriazo
El hallazgo del cuerpo del indigente hizo revivir la molestia de los vecinos con las autoridades debido a los sitios eriazos que existen en esa villa.
Uno de ellos es la cancha de baby fútbol que lleva años abandonada y que constantemente es usada por personas para juntarse a ingerir alcohol y consumir droga, provocando incluso incendios de pastizales.
El otro es el terreno donde fue encontrado el indigente, el cual también es usado
por personas para juntarse a beber alcohol.
Los vecinos señalaron a nuestro medio que en reiteradas ocasiones han enviado cartas al municipio para obligar a que los dueños cierren estos terrenos, pero hasta ahora no han tenido respuestas positivas.
Según indicaron, el terreno de calle Baquedano pertenece a la Iglesia Metodista dueña del colegio Edén del Niño y nunca han hecho nada por levantar alguna construcción allí o la menos reparar el cierre perimetral.
En ambos casos los terrenos baldíos también se prestan para la aparición de microbasurales con el consiguiente riesgo sanitarios para los vecinos que llevan años soportando esta situación.
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