Para esta centenaria fecha especial, cientos de miles de mujeres trabajadoras en distintos países y continentes conmemorarán su día.
Es por esto que comparto con ustedes algunas de las tantas riquezas, características y valores de la mujer que he podido descubrir en mi vida.
Mujer, santuario de vida.
Mujer, celadora y educadora.
Mujer, proveedora y trabajadora.
Mujer, creativa, emprendedora y empresaria.
Mujer, consejo vestido de sabiduría y prudencia.
Mujer, modelo de sacrificio y generosidad.
Mujer, sonrisa en medio de la adversidad.
Mujer, fuente inacabable de ternura y cariño.
Mujer, fortaleza en el dolor.
Mujer, inteligencia delicada y silenciosa.
Mujer, profesional responsable y ejemplar.
Mujer, dirigente diligente.
Mujer, madre incondicional.
Mujer, compañera maravillosa y necesaria.
Mujer, fuente de inspiración de todo artista.
Mujer, mirada profunda de la vida.
Mujer, silencio respetuoso.
Mujer, belleza anhelada.
Mujer, plenitud de un hogar.
Mujer, heroica y orgullo de toda historia nacional.
Mujer, alivio y mano confortante en la enfermedad.
Mujer, apoyo necesario de todo hombre.
Mujer, constructora de una sociedad más humana.
Mujer, religiosa y educadora de la fe.
Mujer es sinónimo de madre, compañera, confidente, cómplice, belleza, amor, inspiración, apoyo, felicidad, ternura, fortaleza, unidad, educación, consejo, comprensión, refugio, religión, consuelo, orientación, maternidad, vida, osadía, previsión, detalle, sensibilidad, acogida, seguridad, alegría, organización, prudencia, delicadeza, contemplación, admiración.
Y, me declaro pequeño para poder seguir describiendo en palabras, tan grande misterio y maravilla que es la Mujer.
Solo me resta decir ¡Feliz Día Admirada Mujer! y perdón por tanto maltrato e injusticia que sufres.
¡Perdón!, porque a muchos hombres y a la sociedad demasiado le falta para llegar a valorarte en tu hogar, en la calle, en tu trabajo o donde quiera que estés.
Y si usted lee este homenaje, le solicito piense en su madre, en su esposa, en su hermana, en su compañera de trabajo y le diga simplemente:
¡Gracias por existir!
Que sea feliz.
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