LOS ANDES (28/05/2025).- Una nueva jornada de movilización llevan a cabo este miércoles los profesores y asistentes de la educación a nivel nacional, convocatoria del Magisterio al que han adherido de manera “simbólica” los docentes de establecimientos educacionales municipalizados de las cuatro comunas de la Provincia de Los Andes.
La acción se lleva adelante al no haber obtenido respuesta del Gobierno y del Ministerio de Educación a las demandas planteadas en la definida agenda corta, en las que se ha insistido en los últimos meses y que motivó el paro de advertencia por 24 horas efectuado el pasado jueves 15.
En el plano local las clases no fueron suspendidas y se desarrollan normalmente, acordándose que durante este mediodía los profesores se manifestaran por unos minutos en el frontis de sus respectivas escuelas y liceos, dando a conocer a la comunidad las situaciones que les afectan.
Viviana Quiero, presidenta del Colegio de Profesores comunal Los Andes, indicó que la agenda corta fue un trabajo desarrollado por los directivos del nivel central donde se expuso al Ejecutivo las situaciones de precariedad solucionables y que se pueden intervenir, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los docentes y los ambientes en las comunidades educativas.
“Los profesores estamos sobrepasados, el agobio es real y nadie da soluciones, sólo se nos exige. Son problemas que están aquejando a los docentes de aula. Decir a la comunidad y particularmente a los padres y apoderados que nosotros no realizamos paros, movilizaciones y salimos a protestar a las calles porque no queremos trabajar, sino que lo hacemos para reflejar una realidad que se esconde en muchos establecimientos”.
Hizo ver la dirigenta que el petitorio que surgió en enero y que fue manifestado al ministro “lamentablemente no tiene ninguna respuesta, por cuanto tenemos temas muy sensibles y que para abordarlos no necesariamente se requiere de dinero”.
Explicó que entre los puntos que les preocupa se encuentra la titularidad docente, “ya que a la mayoría de los profesores jóvenes se les despide al año o a los dos años para que no sean titulares ni adquieran estabilidad laboral, lo que los perjudica enormemente ya que efectivamente quieren hacer carrera docente, acceder a una casa, a un crédito hipotecario; sin embargo, no tienen un contrato que los pueda proyectar en el tiempo como tampoco se les pagan sus vacaciones u otros incentivos”.
Otro tema guarda relación con las funciones de los profesores jefe, señalando que “actualmente tienen una serie de labores anexas a la enseñanza que muchas veces les quita tiempo pedagógico, como hacerse cargo de alumnos con problemas de salud mental, de violencia o situaciones muy complejas, que requiere dedicación para poder mejorar los ambientes dentro de su sala de clases, lo que no es reconocido al no pagarse bonificación ni otorgarse horas demás para la mediación en el aula”.
Asimismo, está lo relativo a los casos de violencia escolar y que les está afectando directas. “Acá en el Valle de Aconcagua tenemos seis profesores con licencia médica al haber sufrido esguinces, pérdidas de piezas dentales y enfrentando situaciones de salud complejas”. Mencionó que esto no ocurre solamente en el sector público, sino que también en el ámbito de los establecimientos particular “que nos los manifiestan, pero que están viviendo problemas similares”.
Vivienda Quiero sostuvo que se ha perdido el reconocimiento al rol del profesor, al reconocer que “antes éramos una figura relevante en la sociedad, pero resulta que hoy tenemos que pedir hasta permiso para celebrar nuestro día ya que ni siguiera nos dan libre y después tenemos que recuperarlo, lo que nos parece inconcebible”, concluyó.
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